Tras la imposición de aranceles de Donald Trump al acero y aluminio a nivel global, así como la amenaza de gravar más mercancías mexicanas, el ingeniero Carlos Slim, presidente honorario y vitalicio de Grupo Carso, consideró que el problema económico del país vecino no se resuelve con impuestos sobre otros países.El empresario señaló que lo que tiene que hacer el Gobierno estadounidense es fortalecer la inversión, reducir gastos “inútiles” y volver a tomar el liderazgo mundial.“El problema económico de la Unión Americana no se resuelve con aranceles, sino con reducción del gasto”, apuntó el empresario.“Yo creo que lo que tiene que hacer Estados Unidos es volver a agarrar el liderazgo mundial que ha tenido y para eso tiene que fortalecer la inversión de su país, reducir gastos inútiles, fortalecer la inversión de su país e irse para arriba económicamente para que no se quede atrás”, agregó.Sobre la decisión del presidente de Estados Unidos de imponer 25% a todas las importaciones de acero y aluminio, el empresario Carlos Slim consideró que la afectación para México sería “marginal”.“Adivino no soy, no soy tan adivino. Primero, no sé qué tanto vendamos de acero y las empresas que aquí venden acero tienen plantas en Estados Unidos. Aquí hay fábricas de acero, lo que exportamos allá pueden tener este asunto, pero estas mismas tienen plantas allá, en Estados Unidos. Entonces de acero no hay problema. Y aluminio no sé qué tanto vendamos aluminio porque yo creo que incluso lo compramos”.Consideró que en el caso del aluminio la afectación sería “marginal”. “Creo que sí (afectaría), aunque no sé qué toneladas compre Estados Unidos, pero lo que sí sé es que hay empresas mexicanas que tienen plantas en Estados Unidos, me da la impresión de que buena parte de lo del arancel puede tener que ver con que produzcan más acero internamente”.Agregó que le parece “un poco irracional” que ante el tráfico de drogas entrando por la frontera Estados Unidos, el Gobierno de Donald Trump no despliegue militares y cuestionó que en el país vecino “por magia” no haya mafias del narcotráfico.Criticó que mientras en Estados Unidos se queda la droga y el dinero que produce este delito, “aquí nos quedamos con las armas y la violencia”.El Universal La agencia calificadora Fitch Ratings advirtió que México enfrenta riesgos de recesión y una posible degradación en su calificación crediticia por la incertidumbre y amenaza de aranceles provenientes de Estados Unidos.Según el análisis de Fitch “La amenaza e incertidumbre de los aranceles de Estados Unidos representan riesgos para México”, el escenario de aranceles del 25% impuestos por el Gobierno del presidente Donald Trump a productos mexicanos podría afectar significativamente el crecimiento económico de nuestro país, hasta llevarlo a recesión.“Si se implementa, el arancel general del 25% tendría un impacto mucho mayor, lo que probablemente causaría una recesión en México en 2025 y reduciría la producción nacional en 3 puntos porcentuales para 2026”, señaló.De implementarse, según Fitch, estas reducirían la competitividad de las exportaciones mexicanas y afectar sectores clave como la manufactura y la industria automotriz, pilares fundamentales del PIB.Estimó que la incertidumbre alrededor de la economía mexicana permanecerá hasta 2026, cuando se revisará el T-MEC. Carlos Slim criticó los análisis de los premios Nobel de Economía que cuestionan la participación de sus empresas en el mercado de telecomunicaciones en México y defendió las inversiones que realizan sus compañías y la forma en que compiten con otros grandes jugadores extranjeros.“Entonces, ¿está mal que Telcel sea competitivo y les gane a AT&T y al que venga? Si eso es malo, si eso piensan los premios Nobel son unos estúpidos”, señaló.Reiteró que Telmex no es preponderante en el mercado mexicano ya que ningún Gobierno le ha dado a sus empresas la posibilidad de otorgar el servicio de televisión de paga y cuestionó que el Instituto Federal de Telecomunicaciones nunca fue autónomo.El empresario dijo que el regulador en lugar de acusarlo de preponderante, que les diga qué quiere de sus empresas, aun si esto implica una reducción de sus inversiones o el número de clientes.“No dicen que sí ni que no. Entonces que venga el regulador y que nos diga cómo la quiere. ¿Qué haríamos nosotros? Si nos dice que quiere que seamos más chicos, pues dejamos de invertir”, advirtió.Sobre la política fiscal en nuestro país, dijo que un impuesto a las fortunas o herencias provocaría una salida de capitales en México e incluso que muchas empresas de origen familiar sean compradas por firmas extranjeras.“Si se hace en herencias, en una generación las empresas mexicanas son extranjeras. Vamos a suponer que tienes una fortuna que le heredas a seis hijos. Para pagar tienen que vender acciones y a la segunda o primera generación ya la empresa no tiene cabeza y lo más probable es que sea adquirida”, comentó.Durante su conferencia de prensa anual, el presidente honorario y vitalicio de Grupo Carso y América Móvil explicó que se necesita inversión. “Es muy importante que haya empresarios, que haya capitales en cualquier país”. CT