Abuela, madre y nieta marcharon este 8M para exigir alto a la violencia contra las mujeres. Tres generaciones pelean para que todas sean escuchadas. María de Lourdes Pérez López tiene 64 años y toda su vida enfrentó la violencia y el maltrato porque nació mujer. Por eso no quiere que otras vivan lo mismo; que los maltratos y la violencia se normalicen. Por eso salió con su hija y nietas. Exige que todas tengan derechos, que la violencia pare, que haya justicia para quienes han sido víctimas, que las mujeres sean fuertes, que sea un mejor México para ellas. “Mis ancestras callaron; yo quiero, por mi hija y mis nietas, que la violencia pare y que de veras nos escuchen, que seamos un México mejor, con mujeres con derechos”.María marchó en el marco del 8M acompañada por su hija, Brenda y la hija de ella, Natalia, así como por su otra nieta, mucho menor, en la conmemoración del Día Internacional de la Mujer. Ellas se incorporaron al contingente integrado por decenas de miles de mujeres, según cifras oficiales, quienes partieron desde la glorieta de La Minerva hasta la plaza Liberación, en el Centro de Guadalajara. La pancarta de Brenda resumió todo: “Las niñas marchando también están luchando”.La alta cantidad de mujeres que han sido víctimas de desaparición y feminicidio en México ha encendido alertas a escala global. Y, por eso, la marcha del 8M en esta ocasión fue encabezada por familiares de quienes han atravesado por estos delitos. Aunado a ello, marcharon quienes sufren violencia vicaria, hostigamientos, violaciones, abusos y maltrato, entre otros. María de Lourdes fue víctima de muchos de estos tipos de violencia. Lo peor es que uno de sus violentadores fueron su pareja, su padre y familiares que, en teoría, eran su red de seguridad. Pero no solo ella. Su madre, quien ya falleció, también sufrió “muchísima violencia, tanto física como psicológica. Fue madre soltera de 5 hermanos míos de diferentes papás y nunca encontró lo que anhelaba y buscaba”.La marcha, concluyó, fue su catarsis para exigirle a las autoridades que los abusos se detengan y que nadie más pase lo que ella.