El mismo día en que se pondera en diferentes medios de información estadounidenses que en los últimos meses el gobierno mexicano con extraordinario resultado ha ampliado sus operaciones en el estado de Sinaloa en contra de los cárteles del narcotráfico, logrando una serie de arrestos de alto nivel, confiscación de laboratorios e incautaciones de drogas y cuando en México se da a conocer ayer mismo que Rafael Caro Quintero, Antonio Oceguera Cervantes -hermano del líder del Cártel Jalisco Nueva Generación-, los hermanos Miguel Ángel y Omar Treviño Morales -conocidos como el Z40 y Z42- líderes y fundadores de los Zetas y de otros 25 más narcotraficantes fueron extraditados a Estados Unidos, el voluble inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump, se dice insatisfecho con los niveles -de decomisos- ofrecidos en los últimos 30 días por nuestro país, calificandolos de “muy altos e inaceptables”, por lo que ayer confirmó que los aranceles a las importaciones desde nuestro se aplicarán a partir del próximo martes “como estaba programado”.En opinión de Trump el castigo a las importaciones se aplica porque no “se ha detenido o limitado seriamente” el flujo de drogas, cuando apenas el martes pasado en Palacio Nacional el secretario de Seguridad Pública y Ciudadana (SSPC), Omar García Harfuch, presumia los resultados de la Estrategia Nacional de Seguridad, donde el decomiso -en lo que va del sexenio- es de más de 13 mil personas detenidas, de casi 113 toneladas de droga decomisada, 1,260 kilogramos de fentanilo y un millón 325 mil pastillas de fentanilo incautados.Ante la descarada necesidad de Trump de aplicar los aranceles, ayer la presidenta Claudia Sheinbaum insistió en tener la “cabeza fría” y tiene la esperanza de que “podamos llegar a un arreglo y que el 4 de marzo podamos anunciar otra cosa”.El inestable presidente norteamericano apenas el miércoles en su primera reunión de gabinete había dicho que los aranceles en contra de México y Canadá se aplicaron a partir del 2 de abril -que minutos después sería puesto en duda por la vocera de la Casa Blanca- y 24 horas más tarde, de manera caprichosa, regresa con el argumento de la fecha del martes, como una demostración de que lo único que quiere hacer es estar “jodiendo” -molestando por decirlo de manera elegante-, hacerse notar y proceder como le venga en gana. Y de “este lado”, como dice Sheinbaum, “cabeza fría”, ante lo que pareciera un personaje con personalidad bipolar y peligrosa.Usted, ¿qué opina?
