En algún momento durante la Nochebuena pasó por mi mente esta mujer debajo de su casa de campaña frente a Casa Jalisco.¿Por qué Lisi Celis de 52 años, arquitecta y madre de dos, acampa frente a la “casa de los jaliscienses” desde el 19 de diciembre?Hay una parte clave en su historia que poco se menciona y se conoce. Para entender la lucha de Lisi hay que saber no sólo qué pelea –la custodia de sus hijos– sino contra quién pelea: su ex marido, el empresario Diego Romo González.Lisi es cofundadora del Frente Nacional contra la Violencia Vicaria que consiste en usar a los hijos, en contextos de separación de la pareja, para causar sufrimiento a la madre al ponerlos en su contra.Este tipo de violencia machista prospera en contextos de alta corrupción en el Poder Judicial, tráfico de influencias y favores políticos como ocurre en Jalisco.El ex esposo de Lisi proviene de una familia de gran poder económico y político. Se trata de los ex dueños de Tequila Herradura que en 2006 vendieron la emblemática tequilera a Brown-Forman Corp por 876 millones de dólares.La ex pareja de Lisi posee desarrollos turísticos exclusivos en las costas de Nayarit y es primo de Guillermo Romo Romero, fundador de Grupo Mega y contratista del anterior gobierno estatal por 3.8 mil mdp para el programa A Toda Máquina.Lisi ha peleado la custodia de sus hijos desde hace seis años, misma que sostiene nunca ha perdido pero se han incumplido las restituciones.En 2019, el padre de sus dos hijos –uno de ellos ahora mayor de edad– se los llevó de vacaciones y ya no los regresó.Desde entonces, sostiene Lisi, ha interpuesto más de 270 recursos para que le regresen a sus hijos y ha enfrentado medio centenar de restituciones fallidas, ayer mismo sumó una más.Pablo Lemus, gobernador de Jalisco, confirmó que según una sentencia, el menor debe estar con la madre, pero se excusó al señalar que es competencia del Poder Judicial.Lisi sostiene que producto de la manipulación paterna que sufrió, su otro hijo de 19 años, ha rechazado regresar con ella.Lisi tiene todo de su lado, la ley y la razón jurídica, pero no a sus hijos.Esta historia podría confundirse con un asunto privado entre particulares. Pero el elenco de personajes es secundario frente a la prevalencia de un sistema judicial y político corrompido.Un patrón aparece en la violencia vicaria: el poder económico que compra a la justicia y el tráfico de influencias de la clase política en distintos niveles.La historia de Lisi tiene muchos nombres: Anel, Alma Verónica, Jessica, Abigail, Mary Carmen… Por eso Lisi ha llevado a un espacio público su demanda. Su plantón cumple hoy 20 días (Lisi lo tasa en horas: 449 y contando).