Talento y perseverancia es lo que Roberto y Daniel Galván consiguieron en DRG Constructora, un proyecto familiar que fue creciendo como sus obras.El camino inició con Roberto en el trabajo de acabados residenciales, enfocado en la tablaroca, la carpintería y el aluminio, pero al sumarse Daniel con su conocimiento de ingeniero arquitecto las cosas cambiaron de dimensión.“Pensamos en iniciar un proyecto que trabaje desde la construcción. Casas habitaciones es nuestro fuerte, pero también desarrollamos proyectos como naves industriales”, comparte Roberto, el mayor de los hermanos.La experiencia es fundamental y hacer crecer un negocio es un trabajo gradual para solidificarse. “Tenemos más de 10 años de experiencia, con el tiempo hemos evolucionado al iniciar con lo sencillo, revestir la obra con los acabados de construcción y evolucionar a desarrollos más generales a proyectos completos: desde urbanización y movimientos de tierra hasta los denominados llave en mano”, agrega Daniel, quien ha colaborado con varias constructoras en su carrera y eso le ha permitido definir su concepto personal.“La mayoría de las constructoras tenemos el mismo esquema, el diferenciador en DRG es que el seguimiento lo tenemos muy puntual con el cliente, no todas lo hacen, se van directo a cerrar el trato, generar y terminar la obra. Nosotros tenemos un acompañamiento con el cliente tanto financiero como de avance de la obra, los cambios en el proyecto, un calendario bien estructurado y fiscalizado para entregar en tiempo”, señala Daniel, quien afirma que la confianza y transparencia que generan con el cliente es el sello de la compañía.DRG tiene un equipo compacto encargado de hacer posible los proyectos y esto se debe a que la compañía abre la bolsa de trabajo de acuerdo a la demanda de obras confirmadas, esto fue una estrategia que funcionó durante la pandemia, cuando la mayoría de las empresas vieron afectada su operación.“Cuando llegó la pandemia hicimos home office, nuestra estrategia fue implementar más el trabajo en diseño, en ese momento nos movimos con amigos y conocidos apoyando sus proyectos, incursionamos en diseño de interiores, diseñamos por completo un bar, un proyecto a futuro de unos amigos, pero aprovechamos el tiempo para echar volar la imaginación”, comparte Daniel. Y para solventar los gastos se enfocaron en el mantenimiento tanto en ingeniería como en obra para compañías en el ramo de la salud, lo que garantizó una agenda activa de trabajo.A lo largo del tiempo, Roberto y Daniel han aprendido la importancia que cada obra tiene para sus clientes. Desde renovar un rincón en el hogar hasta construir un proyecto de vida. “Somos muy versátiles, desde cambiar el piso de un baño hasta las naves industriales. Cada cliente es especial, nos interesa conocerlos, que nos mencionen sus necesidades para ayudarlos en lo que requieran. La cotización es importante y tratamos de apoyarlos en ese sentido también”, anota Roberto.Como contratista, Roberto reconoce una urgencia para un cliente, como cuando se trata de una fuga en una casa habitación o una empresa, pero es consciente de la capacidad de respuesta de la compañía con sus proyectos en marcha, pero siempre tienen una alternativa para cada llamado. “Si un cliente necesita la reparación de una fuga en el drenaje o de agua, pues es más urgente que remodelar una cocina”.“Respondemos con la urgencia del cliente y nos interesa ser honestos y mencionarle si la disposición del personal es suficiente para apoyarlo en su proyecto o su emergencia, al ser un potencial cliente tratamos de darle una respuesta, canalizando su solicitud o haciendo una cotización y agendando a la brevedad y si nos da el sí nos integramos a su proyecto”, agrega Daniel.Para la compañía lo importante es que cada potencial cliente encuentre en DRG Constructora un apoyo para cada necesidad. La clave está en la calidad tanto en el trato humano como en el resultado de la obra, es una cuestión integral, al final se trata de desarrollar proyectos ajenos como si fueran propios. Daniel y Roberto reconocen que en plena era digital la mejor recomendación para su compañía es la de toda la vida: de boca en boca. La experiencia de sus clientes les ha hecho encontrar nuevos proyectos y fidelizar algunos de ellos.“Nuestra prospección es sobre todo en redes, pero la mejor recomendación es de boca en boca, nuestros conocidos, familiares y amigos conocen nuestro trabajo, desde pequeñas remodelaciones así que eso nos ha ayudado”, comenta Roberto. CT