
Pueblo de Salò es el último en retirar los honores a Benito Mussolini
Se trata de la última remembranza de la Italia fascista, misma que abarcó del año 1922 a 1943

La 'República de Salò', fue un último intento desesperado del dictador y de los nazis de mantener el control de parte del país. UNSPLASH / X. von Erlach / ESPECIAL / German Federal Archives
La localidad italiana de Salò —región norte—, considerada la "capital" del último bastión fascista durante la II Guerra Mundial, ha retirado la ciudadanía honorífica al dictador Benito Mussolini más de un siglo después de concedérsela.
La junta municipal aprobó por doce votos a favor, tres en contra y una abstención a la propuesta que retira la ciudadanía honorífica al dictador fascista, concedida el 24 mayo de 1924.
El alcalde de Salò, Francesco Cagnini —que en 2024 logró arrebatar el poder a la derecha tras dos décadas con una lista cívica de centroizquierda—, aseguró que no busca "dividir", como reprochaba parte de la derecha, sino defender "la libertad y la democracia".
"Este alcalde nació casi cincuenta años después de la liberación de 1945 por lo que esto no puede verse como una contraposición ideológica sino como un momento de unión y pacificación que reafirma el amor por la libertad y la democracia. Es una medida que mira al futuro", refirió ante el pleno.
Lee: Cáncer de mama: 1 de cada 20 mujeres lo padecerá, según estudio
Y subrayó que la ciudadanía honorífica a Mussolini fue otorgada en 1924 —dos años después de su toma del poder— obligados por los escuadrones fascistas, como muchos otros municipios.
La revocación de la ciudadanía a Mussolini se produce 80 años después del final de la Segunda Guerra Mundial, tras la "liberación" de Italia del fascismo. Cabe recordar que la tríada del Eje estaba conformada por Alemania, Japón e Italia. El dictador gobernó el país durante dos décadas hasta ser ejecutado en 1945 por partisanos. Posteriormente, su cadáver y el de su amante, Clara Petacci, fueron colgados en la Plaza Loreto de Milán.
Desde entonces, numerosos municipios han ido renegando del legado del dictador, pero cobra un especial significado en Salò, pues fue en esta localidad de la provincia de Brescia —a orillas del lago de Garda—, donde los últimos fascistas intentaron resistir.
Lee también: Hallan impresionante mural del dios Dionisio en las ruinas de Pompeya
El pueblo fue la capital de lo que se conoció como la República social Italiana, el bastión fascista controlado por la Alemania nazi que gobernó parte del norte del país tras la rendición del Reino de Italia a las fuerzas aliadas en septiembre de 1943.
La 'República de Salò', que en realidad incluía este pueblo y otros de las inmediaciones, fue un último intento desesperado del dictador y de los nazis de mantener el control de parte del país, aunque los fascistas fueron definitivamente derrotados en 1945.
Sin embargo, algunos de los últimos fascistas que formaron parte de la República Social Italiana, como Giorgio Almirante, continuaron en la política dentro del sistema democrático y fundaron el Movimiento Social Italiano, partido que está en los orígenes de los actuales Hermanos de Italia, liderado por la primera ministra Giorgia Meloni.
Te puede interesar: Tras 40 años, insurgentes kurdos declaran alto al fuego en Turquía
*Mantente al día con las noticias, únete a nuestro canal de WhatsApp.
AO
Lee También
Recibe las últimas noticias en tu e-mail
Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día
Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones