La apertura verbal de un escritor

GUADALAJARA, JALISCO (03/DIC/2013).- Fernando del Paso se hace cada día más cercano. A últimas fechas se ha vuelto un habitual visitante de ferias y encuentros dedicados a celebrar la lectura, además de que eventualmente surgen distintos homenajes en su honor.

De cuando en cuando asiste a alguna inauguración o evento cultural, y todavía está convencido de que lo importante es que más personas lean su obra cúspide, Noticias del Imperio.

La novela ha sido traducido al portugués, francés, inglés, alemán, holandés y chino.

Resulta una obra monumental, con gran riqueza de lenguaje, y según Paco Ignacio Taibo I es: “una novela para armar, dividida en tres libros”: el monólogo interno de Carlota inmersa en su locura; la crónica histórica a veces irónica y a veces crítica; y la novela, que cruza y entreteje las vidas de Benito Juárez con la de los emperadores; las ambiciones de México contrapuestas a las de Francia.

Así lo dijo en el homenaje que recibió el año pasado en la Feria Internacional del Libro (FIL), donde no le fueron suficientes los aplausos y los cálidos recibimientos de sus lectores conocidos, sino que llamó a quienes no lo han hecho a que comiencen la odisea.

Incluso, leyó algunas líneas de la obra. Noticias del Imperio no pierde vigencia ni se desgasta después de mil y un homenajes.

Este año, Del Paso recibirá el título de Doctor Honoris Causa por parte de la Universidad de Guadalajara (UdeG). Fernando es escritor, dramaturgo, periodista, y alguna vez dibujante y pintor. Antes intentó estudiar Economía en la Universidad Nacional Autónoma de México, carrera que no terminó; trabajó en agencias publicitarias por casi 14 años.

También, quiso ser médico por una inspiración romántica, pero cambio de parecer por su terror a la sangre y los malos olores; además, porque “conocí a la que ahora es mi mujer y quise casarme. Y no se puede estudiar medicina y estar casado”.

A los 18 años, conoció a José de la Colina y al colombiano Antonio Montaño, que lo orientaron en sus primeras lecturas. Encontró en El rayo que no cesa de Miguel Hernández “un mundo insospechado, que además yo tenía dentro”.

Fue en esa época que del Paso escribió, como un “ejercicio de versificación” el libro Sonetos de lo diario, publicado en 1958 por Juan José Arreola en la colección de El Unicornio, del FCE.

Nació en 1935 en la Ciudad de México y desde niño, se sintió atraído por las tiras cómicas de los periódicos y tuvo el sueño de expresarse a través del dibujo: “El dibujar es una venganza de mi mano izquierda al acto de escribir”, afirma del Paso al referirse a su trabajo como artista plástico.

Hace algunos años anunció que ya no escribirá novelas. En su cabeza sólo habitan obras de teatro y uno que otro ensayo, como su más reciente libro, una investigación titulada Bajo la sombra de la historia. Ensayos sobre el islam y el juadísmo.

No es para menos. Su primera novela, José Trigo, fue un esfuerzo que duró siete años de trabajo, y lo hizo acreedor al Premio Xavier Villaurrutia, el primero de varios que habrían de venir. Tenía cáncer cuando la escribió.

Después residió algún tiempo en la ciudad de Iowa, Estados Unidos, con una beca de escritor, hasta que en 1971 se mudó a Londres donde a la par de sus proyectos literarios trabajó como productor de radio, escritor y locutor en la BBC.

También vivió en París, donde nació Noticias del Imperio. Luego se vino a Guadalajara a dirigir la Biblioteca Iberoamericana “Octavio Paz” de la Universidad de Guadalajara.

Como escritor le debe mucho a James Joyce, William Faulkner y a Carlos Fuentes. Como mexicanos, todos le debemos un poco a Fernando del Paso, quien hizo una revisión narrativa deliciosa e irresistible de la historia íntima y pública de Maximiliano y Carlota. Dice que no se arrepiente de nada. Se aleja del estereotipo del artista perfeccionista, que nunca aprende a amar lo que ha creado. “Me ha asombrado y halagado que Noticias del Imperio sea usado no solamente en cursos de literatura sino de historia.

Me asombra lo de la historia, porque no creo que nadie pueda trazar una línea así en los diversos capítulos y diga de aquí para acá esto es ficción y esto es historia, están sumamente entremezcladas (…) Pero quiero hacer hincapié en que la enorme ventaja que tiene el escritor que hace una novela histórica es que el historiador tiene una sola voz, no puede hablar sino con su voz, en esa voz se pueden detectar influencias, otras voces tal vez de historiadores que lo han influido, pero sigue siendo una sola voz; en cambio, el novelista puede acudir a muchas voces distintas incluyendo la de los historiadores”, dijo en una entrevista para el periódico La Jornada en 2007.

FRASE

"Las artes, son más dulces que los destellos de una corona... "

Fernando del Paso, escritor

PARA SABER
En la FIL

Día: Jueves 05 de diciembre.

Actividad: La Universidad de Guadalajara le entrega el Honoris Causa.

Hora: 11:00 am

Participa: Itzcóatl Tonatiuh Bravo Padilla.