“Mientras la esperanza descansa en ella, para mantener la llama despierta, y en las noches el amor espera cerrar la caja de Pandora”. J. GongoiEste jueves último de febrero cerramos el tema del amor, del que, entre las formas del de ayer y de hoy existe una gran diferencia. El tema del amor de antaño no se refiere a romances de novelas o películas, sino a amores no sometidos a tantas dudas existenciales o ambiciones personales. Hoy, en este Siglo XXI que se ha descartado el romanticismo y la sensibilidad, donde comprometerse no es requisito para la relación, no hay adaptación a la realidad porque existe la desconfianza en la durabilidad del amor. A lo largo de la historia, la humanidad ha estado en permanente transformación, pero en los últimos años los cambios han sido rápidos, profundos y lamentables en lo relacionado al conjunto de valores que perfeccionan al hombre. Equivocadamente se transmite el concepto de progreso destruyendo el pasado, los valores morales tradicionales están siendo veloz y veladamente suplantados por conductas de insensibilidad y egoísmo que atacan la dignidad y el respeto.Recordando la mitológica Caja de Pandora como la venganza de Zeus a Prometeo… Zeus le regaló la caja a Pandora, quién al abrir la tapa del engañoso regalo volaron innumerables males que se desparramaron por la tierra; entre ellos la locura, los vicios, el crimen, las bajas pasiones, la maldad y demás calamidades que nos aquejan con los diferentes fenómenos políticos, económicos y sociales. Pero, quedó en el fondo un único bien: “La esperanza” que Pandora encerró antes de que pudiera volar. Ese espíritu de esperanza que —en el tránsito de nuestra existencia— nos permita aprender y concebir modelos para la construcción de un mundo mejor. No pretendemos regresar los males del mundo a la caja y cerrarla con 7 llaves, pero podemos cooperar con la gran fuerza del amor, creando voluntad de generosidad, respeto, tolerancia, bondad y sonrisas para un mejor entorno de nuestras vidas y de quienes nos rodean.... los males del mundo se han esparcido entre los humanos, solo la esperanza del AMOR queda guardada en el fondo del arca de nuestras vidas.Las novias que engalanan esta columna nos muestran diferentes modas, diferentes tiempos, pero coincidentes todas con la fiel creencia del amor.