Cada vez que se trata de aprender un nuevo idioma, las personas se enfrentan a la dificultad que puede variar según las similitudes con el idioma materno, es decir, aquel con el que se comunica en el lugar donde vive. Para los mexicanos, cuya lengua nativa el español, algunos presentan retos mayores debido a diferencias en aspectos tales como la escritura, la pronunciación y la estructura gramatical.Obedeciendo a la curiosidad, preguntamos a la Inteligencia Artificial cuál es idioma más difícil para aprender para un mexicano, y aunque como primera opción se pensaría en el chino, para la IA, el húngaro tiene ese lugar.El idioma húngaro pertenece a la familia de lenguas urálicas, completamente diferente de las lenguas indoeuropeas tales como el español. Esto quiere decir que no comparte raíces en su forma, ni similitudes gramaticales.La gramática del idioma húngaro incluye más de 20 casos gramaticales, mientras que, según la Academia Mexicana de la Lengua, el español NO tiene casos ni declinaciones, lo que complica la construcción de oraciones para los hablantes, y la declinación de palabras según su función en una frase. Otro idioma que cuenta con casos y declinaciones es el latín, pero esto no se heredó al español.En el húngaro, las palabras se construyen a través de un sistema aglutinante, donde prefijos y sufijos se añaden para cambiar el significado o la función de una palabra. Esto puede resultar confuso para los hablantes de español, que están acostumbrados a una estructura más sencilla y directa. Un ejemplo de idioma que utiliza esta estructura es el alemán.Aunque utiliza el alfabeto latino, el húngaro tiene letras y combinaciones de sonidos que no existen en español, como la "ö" y la "ü", que requieren un ajuste en la posición de la lengua y los labios. Además, la entonación y ritmo del húngaro son muy diferentes, lo que dificulta su aprendizaje auditivo.A diferencia de idiomas como el inglés o el francés, que comparten palabras similares al español debido a sus raíces latinas o griegas, el húngaro tiene un vocabulario completamente distinto. Esto significa que no hay cognados que faciliten la memorización de palabras nuevas.Aunque el húngaro no es un idioma popular, ya que solo lo hablan 15 millones de personas en el mundo, aprenderlo puede abrir puertas hacia una cultura rica y fascinante. Hungría tiene una historia vibrante, una gastronomía única y oportunidades de estudio y trabajo en Europa Central. Además, dominar un idioma tan complejo puede ser un logro personal muy importante, y demostrar habilidades excepcionales para el aprendizaje.Además, se tendría la oportunidad de leer a escritores como Sándor Petőfi, Kálmán Mikszáth, József Kiss, Attila József, Margit Kaffka, o Sándor Márai, en su lengua original.*Mantente al día con las noticias, únete a nuestro canal de WhatsAppOF
