Único en su tipo en Latinoamérica, el Bachillerato Tecnológico en Cerámica, de la Escuela Preparatoria de Tonalá, busca impulsar de manera profesional el talento de jóvenes que por gusto o tradición familiar quieren dedicarse al oficio de alfarero.Héctor Pelayo García, director de la escuela, señala que: “La Universidad de Guadalajara ofrece a la comunidad de Tonalá y a otros interesados un programa académico específico y con un marco curricular para ser un ceramista de profesión, por lo que lo hace muy atractivo para los jóvenes”.Las instalaciones del bachillerato en cerámica están ubicadas en el centro del municipio (Independencia 232, esquina con Allende), ahí se ubican las aulas y los talleres especiales que los estudiantes necesitan.“La comunidad Tonalá es un gran centro artístico en diferentes artes como la cerámica, escultura, pintura entre otras, era obligado que la UdeG tuviera un bachillerato que le ofertara a la comunidad un programa con una carga curricular que le sirvieran a los hijos de los artesanos. Estamos enfocados a darle formación a nuestra comunidad de una forma más tecnológica, científica y sistemática, estructurada para que el estudiante no sólo tenga una formación lírica, si no también una base académica.Los talleres están organizados por las áreas del proceso de elaboración de las piezas, contando con herramienta especializada como tornos, moldes, pintura, hornos entre otros. “Una de las ventajas de bachillerato en cerámica es que los alumnos no se preocupan por el material, este lo proporciona la escuela, pero con la condición de que las piezas se queden aquí. Con esto, cada semestre llevan a cabo subastas y exposiciones, los recursos generados son para equipar la escuela”, explica Pelayo García. Como parte de los proyectos que realizan los estudiantes se encuentran las piezas que Letras para volar, (programa de promoción de la lectura de la Universidad de Guadalajara, coordinado por Patricia Rosas), entrega como galardón a las instituciones que colaboran con ellos. También está la escultura de reconocimiento que entrega la Defensoría de Derechos Universitarios. Ludvig Rosas Chávez, secretario del plantel explica que el proceso de admisión a la institución se realiza en www.escolar.udg.mx. La matrícula es de 50 alumnos por calendario. “Los jóvenes deben hacer su trámite como lo indica el sistema, presentar su examen general, luego una evaluación interna para medir sus aptitudes y conocimientos previos en cerámica, después sale el dictamen final de admisión”. CT