La presidenta de la Sala Superior del Tribunal Electoral de la Federación, Mónica Soto Fregoso, justificó el haber invalidado el amparo interpuesto por el juez de Distrito con sede en Michoacán, Sergio Santamaría, para echar atrás la reforma judicial, porque en materia electoral un recurso de este tipo no es procedente.“Se rechazó el intento de invadir la competencia del Tribunal Electoral por un juez incompetente. La Ley de Amparo establece una prohibición para los jueces. No procede. El Tribunal Electoral es la máxima instancia en materia electoral del país. No hay sentencia que pueda revocar, modificar o rechazar nuestras sentencias. Somos la última instancia y, por supuesto, tampoco en materia electoral se pueden suspender las elecciones”.Recordó que la Constitución establece que ningún medio de impugnación puede suspender un proceso electoral, por lo que el juez Santamaría violó la Carta Magna y el Tribunal interpuso una denuncia penal por posibles delitos contra la administración de justicia. “Este juez nos manda suspender nuestras actividades, y además nos pide que le hagamos llegar los medios de impugnación que tenemos, que son juicios ciudadanos con esta materia, para resolverlos él. Hay que reiterar que la reforma ya fue, es vigente y todo lo que se pudo hacer para echarla abajo no se logró”.Reiteró que la Suprema Corte de Justicia de la Nación desestimó echar abajo la reforma, pues se trata de materia electoral, donde no aplica dicho intento de intervención.Por otra parte, acentuó que la reforma judicial será una oportunidad para mejorar el sistema de impartición de justicia. “Me parece que todas las personas que están inscritas y que han sido valoradas por los comités que no renunciaron, dan una garantía de que hay perfiles”.Si bien reconoció que hay poco tiempo para implementar este proceso electoral extraordinario, sostuvo que hay instituciones capaces y con herramientas para llevarla a cabo. CT