Miércoles, 25 de Diciembre 2024

Testigos vivientes de la historia de la ciudad

Aumentan las estructuras arquitectónicas que le dan identidad a la metrópoli

Por: El Informador

Los Arcos de Guadalajara se convirtieron en la entrada a la ciudad, tras la inauguración, en 1938, de la Carretera México-Morelia-Guadalajara. EL INFORMADOR/ H. Figueroa

Los Arcos de Guadalajara se convirtieron en la entrada a la ciudad, tras la inauguración, en 1938, de la Carretera México-Morelia-Guadalajara. EL INFORMADOR/ H. Figueroa

La llamada Perla Tapatía y sus alrededores se encuentran enmarcados no sólo por edificios arquitectónicos emblema, como lo son la Catedral Metropolitana de Guadalajara o el Teatro Degollado, sino que también cuenta con monumentos que forman parte de su identidad, representando cada uno de ellos la memoria física de su historia. Cada monumento cuenta en sí mismo una historia única que conecta el pasado con el presente.

Al ser identificadas como parte de la ciudad, cada una de estas estructuras arquitectónicas se vuelven testimonios vivientes de la evolución de la sociedad a lo largo de los años.

Los Arcos de Guadalajara: fueron construidos en 1939 a cargo del ingeniero y arquitecto Aurelio Aceves, en colaboración con el arquitecto Constantino Ramírez Fonseca, tomando como base el dibujo Faustino González. Su inauguración se dio en el año 1942, cuando era entonces gobernador Silvano Barba González con la finalidad de celebrar los 400 años de la fundación de Guadalajara.

La Minerva: es uno de los monumentos íconos más importantes en Guadalajara. Está representada por una imponente escultura de la diosa romana Minerva (reconocida también como Atenea, en la cultura helénica) que resguarda a la ciudad; se le atribuye la sabiduría, la medicina, las artesanías, el arte, la poesía y el comercio. Obra de Joaquín Arias Méndez y Pedro Medina Guzmán, quienes le dieron figuradamente los dones de “justicia, sabiduría y fortaleza”.

La Glorieta de los Niños Héroes: Conmemora la historia de la Batalla en el Castillo de Chapultepec, donde seis cadetes mexicanos pelearon contra invasores estadounidenses, en 1847. El monumento fue diseñado por Vicente Morales Mendiola, en 1950, obra de Juan Fernando Olaguíbel.

Glorieta Colón: una glorieta única en Guadalajara, ya que el Cristóbal Colón que le da el nombre se yergue a 10 metros de altura desde su base a nivel subterráneo, mientras que el espacio ojival en el que confluyen las avenidas Circunvalación Jorge Álvarez del Castillo, Américas y López Mateos, se constituye como la estructura que forma la glorieta a nivel superficie.

Arcos del Milenio: Compuestos por cuatro imponentes arcos color amarillo, de los cuales uno envuelve a la Avenida Lázaro Cárdenas. Hay arcos pendientes de construir.

CT

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