Guadalajara, la "Perla de Occidente", es una ciudad con una gran riqueza histórica y cultural, sus barrios y colonias reflejan la identidad tapatía a través de su arquitectura, gastronomía y costumbres. Varias colonias de la capital tapatía cuentan con historia y tradiciones que las caracterizan y las vuelven llamativas. Una de las colonias más representativas es San Juan de Dios, un barrio que, con su mercado icónico y su historia centenaria, se mantiene como un punto clave de la vida cotidiana en la capital jalisciense.Ubicado en el corazón de Guadalajara, el barrio de San Juan de Dios es reconocido por su actividad comercial, su valor histórico y su papel en la cultura popular; en él se encuentra el Mercado San Juan de Dios (o Mercado Libertad), el más grande de Latinoamérica, donde locales y turistas pueden disfrutar de antojitos típicos como la birria, las tortas ahogadas y las jericallas, además de adquirir artesanías, ropa y tecnología a precios accesibles.Además del mercado, el barrio alberga el Templo de San Juan de Dios, una iglesia que data del siglo XVII y que forma parte del legado arquitectónico de la ciudad. También se encuentra el Hospital Civil Viejo, una de las instituciones médicas más antiguas e importantes de México, con más de dos siglos de historia.Si bien Guadalajara tiene otros barrios llenos de tradición, como Analco, Santa Tere y Mezquitán, San Juan de Dios destaca por su dinamismo, su comercio vibrante y su capacidad para preservar las costumbres tapatías a lo largo del tiempo.San Juan de Dios no es solo un barrio con historia, sino un símbolo vivo de la esencia tapatía y caminar por sus calles es sumergirse en el pasado y el presente de Guadalajara, con su mezcla de tradición, gastronomía y comercio. Para quienes buscan conocer la ciudad desde su raíz, este barrio es una parada obligada. YC
