Pablo Lemus, Verónica Delgadillo y José María “Chema” Martínez se comprometieron a que de ganar las elecciones a la gubernatura de Jalisco y al Ayuntamiento de Guadalajara, respectivamente, continuarán con la ayuda a los sobrevivientes de las explosiones del 22 de abril de 1992 en el Sector Reforma. Este hecho dejó más de 200 fallecidos (de acuerdo con cifras de las autoridades), más de mil lesionados y al menos un centenar de personas desaparecidas. Ayer, luego de la misa en el templo de San Sebastián de Analco, los miembros de la Asociación 22 de Abril en Guadalajara presentaron un pliego petitorio a los candidatos. Entre los puntos que los llamaron a cumplir estuvieron: promover una iniciativa de ley para que el fideicomiso de apoyo a las víctimas cuente con el dinero suficiente para garantizar pensiones y servicios de salud hasta el fallecimiento de todos los beneficiados; que se homologuen los recursos que recibe cada uno; que se integre a cinco personas que demostraron tener derecho formar parte del fideicomiso, y que los servicios funerarios contratados por el Gobierno del Estado no consideren cobros extra. Lilia Ruiz, presidenta de la agrupación mencionada, le comunicó dichas demandas directamente a Pablo Lemus, aspirante a la gubernatura por Movimiento Ciudadano (Claudia Delgadillo, de Morena y aliados, y Laura Haro, de la alianza del PRI, PAN y PRD, no acudieron al evento). “Una vez que asuma el cargo, es necesario promover una iniciativa de ley estatal para que de una vez por todas se tenga seguridad de que el fideicomiso cuente con los recursos suficientes para cubrir integralmente las pensiones y los servicios de salud, medicinas e insumos sanitarios para las mencionadas personas sobrevivientes hasta su fallecimiento”, acentuó.Ruiz agregó que el actual gobernador no cumplió su palabra y por eso no se apersonó en Analco. “Nos falló el señor. Por eso no invitamos a las autoridades que están en el Gobierno. Ya para qué, si ya se van. Para nosotros fue más malo que bueno lo que hicieron”.Lemus respondió que como presidente municipal tapatío incrementó los recursos para las víctimas de las explosiones. Afirmó que si llega a Casa Jalisco insistirá en que Petróleos Mexicanos (Pemex) asuma su responsabilidad en la tragedia. “Pemex no solamente se tiene que disculpar públicamente, sino que adicionalmente tiene que entregar recursos: el responsable de las explosiones del 22 de abril de 1992 fue Pemex y jamás se ha hecho cargo, ni de los gastos médicos, ni de pensiones, ni de absolutamente nada”. Verónica Delgadillo, quien busca la alcaldía de Guadalajara por Movimiento Ciudadano, recordó que como senadora pidió que la paraestatal asumiera su parte. “Me comprometo a que no quede silenciada esa voz. Una disculpa pública de Pemex no es suficiente. También es importante el reconocimiento de las autoridades para intervenir en la reparación del daño a las familias”, subrayó Delgadillo. “Chema” Martínez, que pretende tomar las riendas del Ayuntamiento tapatío con Morena y sus aliados, comentó que acudió a escuchar a las víctimas y no a politizar. Aseguró que si gana los comicios del 2 de junio, respaldará a los perjudicados. El Gobierno estatal informó que este año los sobrevivientes recibirán 5.5 millones de pesos (MDP). Aseveró que en los seis años de la actual administración se les entregaron un total de 12 MDP. El 23 de abril de 1992, esta casa editorial publicó que un día antes 13 kilómetros de calles en la ciudad desaparecieron por las explosiones que se registraron alrededor de las 10:10 horas en el sistema de colectores en el Sector Reforma. “El hecho provocó una inmensa respuesta solidaria de la ciudad y brigadas de voluntarios se unieron a los cuerpos de emergencias y seguridad para rescatar a quienes bajo los escombros quedaron sepultados. La causa no se ha precisado, pero todo indica que fue una mezcla de gasolina gasificada con hexano y metano que se convirtió en una bomba de tiempo que estalló puntualmente y enlutó a Guadalajara”, se resaltó en la edición impresa de la fecha referida. Este medio de comunicación dio a conocer ayer que apenas 13 de los 125 municipios de Jalisco cuentan con un Atlas de Riesgo registrado ante el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred). El mapa tiene como objetivo la identificación del territorio y de los peligros que pueden afectar a la población. A partir de esta información se toman decisiones para estar prevenidos ante emergencias. Tienen este documento Autlán de Navarro, Chapala, Cihuatlán, Guadalajara, Ixtlahuacán de los Membrillos, Jocotepec, Lagos de Moreno, San Pedro Tlaquepaque, Tepatitlán de Morelos, Tlajomulco de Zúñiga, Tonalá, Zapopan y Zapotlán el Grande. CT
