Este martes 11 de febrero, el grupo político de extrema derecha de los Conservadores y Reformistas (ECR) al Parlamento Europeo anunció que iba a pedir una comisión de investigación a propósito de las formas de financiación de la Unión Europea a las ONG de varios sectores. Este anuncio llega tras que los grupos de derecha hayan acusado a la Unión y a Bruselas de pagar a estas organizaciones no gubernamentales para que hagan ‘lobby’ en materia de protección ambiental. Nicola Procaccini, eurodiputado italiano y líder de este grupo parlamentario, avanzó en la prensa que quiere arrojar luz sobre "la financiación de la Comisión a las ONG para influir en la legislatura" y agregó que su grupo político empezó a compilar las firmas que necesitan para plantear de manera oficial esta comisión de investigación. Al principio de este mes, la comisión de Control Presupuestario del Parlamento Europeo, a través de sus eurodiputados, pidieron en una carta a la Comisión Europea una lista de todas las financiaciones que dieron siete direcciones generales de la Comisión durante 2023.La misiva, revelada por el diario de información europea Politico, llegó después de que la vicepresidenta popular de esta comisión parlamentaria, la alemana Monika Hohlmeier, asegurara en el hemiciclo que tenía pruebas de que el departamento comunitario responsable del programa ambiental LIFE había otorgado financiación a diversas ONG para que hicieran cabildeo a otros departamentos del Ejecutivo comunitario.El diario Politico, que ha tenido acceso a algunos de estos contratos, señala que no ha encontrado evidencias de que la Comisión Europea condicionara estos fondos a que los receptores hicieran cabildeo en su nombre.En la Eurocámara, las comisiones de investigación tienen un mandato de un año y durante ese tiempo pueden llamar a testigos, solicitar documentos e informes pertinentes y organizar misiones para elaborar un informe no vinculante sobre la situación.La última comisión de investigación que se aprobó en la Eurocámara se centró, por ejemplo, en el uso del 'software' de espionaje Pegasus en la UE.Para plantear internamente la creación de esta comisión, ECR necesita la firma de una cuarta parte de los diputados del Parlamento Europeo, que en esta legislatura equivale a 180 miembros.Con los dos grupos de ultraderecha parlamentaria (Patriotas por Europa y Europa de las Naciones Soberanas), que serían en principio favorables a esta investigación, ECR podría iniciar el proceso.La creación formal de la comisión requiere, no obstante, de una mayoría entre los líderes de los grupos políticos y en el pleno de la Eurocámara, donde necesitarían al Partido Popular Europeo (PPE) para llegar a una mayoría.La diputada que ha impulsado la misiva a la Comisión Europea y otros que han alzado la voz sobre este caso pertenecen al PPE, pero un portavoz de la formación señaló a EFE que la cuestión no se ha debatido a nivel interno y que el grupo "no está a favor, en general, de multiplicar comisiones parlamentarias especiales".El bloque más progresista del hemiciclo, por su parte, se ha declarado generalmente a favor de mejorar la transparencia de los fondos europeos, pero advierte de un intento de los ultraconservadores de debilitar el Pacto Verde Europeo y de lanzar la sombra de la duda sobre las organizaciones de la sociedad civil que lo defienden.El líder del grupo de los Verdes/Alianza Libre Europea, Bas Eickhout, definió la iniciativa conservadora como "tirar mierda a una pared para ver qué se queda pegado", al tiempo que advirtió de que el apoyo público a las ONG es necesario para contrarrestar la financiación privada a los grupos de presión que representan los intereses de la industria.TS