Los errores que mermaron la popularidad del primer ministro

Tras jurar el cargo de primer ministro hace una década, Justin Trudeau desveló los nombres de su primer gabinete, en el que por primera vez en la historia de ese país, había el mismo número de ministras y ministros.

Cuando los periodistas le preguntaron por el significado del gesto, respondió de forma elegante y contundente: “Porque es 2015”. Todavía dos años después tenía la popularidad suficiente para aparecer en la portada de la revista Rolling Stone.

Aquellos gestos y luces ahora lucen lejanos ante los “pecados” que le endilgan sus opositores y buena parte de la ciudadanía canadiense, que no le perdonan su mal manejo económico, migratorio y de relaciones exteriores.

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• Economía: Tras la pandemia la inflación se elevó al 8% y el desempleo llegó al 6.4 por ciento. Sin ser mediocre, sus críticos acusan el haber inundado la economía con impuestos onerosos.
• Vivienda: Un problema global que en Canadá se acentuó, en especial en las grandes ciudades, como Vancouver, Toronto y Montreal, donde los precios de las rentas ya son impagables.
• Migración: Recibir más de un millón de migrantes por año desde 2022 sin contar con un sistema de salud ni laboral capaz de absorverlos ha sido una cruz muy pesada sobre la administración liberal.
• División del voto: Durante el mandato de Trudeau apareció el Partido Democrático, que le arrancó a los liberales espacio en la cámara y peor aún: votantes. A esto se suma la lucha del primer ministro con otras figuras de su movimiento político.

CT