Originaria de Guadalajara y con apenas 29 años, Carolina Santana ha encontrado en la moda y el arte textil un lenguaje propio. Su historia inició hace unos años en pasarelas como modelo independiente, pero más tarde descubrió que su verdadera pasión estaba en crear. Hoy, sus piezas —tejidas y pintadas a mano con tintes naturales— no solo son moda, son relatos en forma de hilos, donde se entrelazan sostenibilidad, arte y emociones.Inspirada por figuras mexicanas como Luis Barragán y Remedios Varo, Carolina refleja una concepción de la moda y el arte llena de sensibilidad, modernidad y color.“Me motiva la posibilidad de transformar lo cotidiano en algo bello y significativo, soy comprometida con mis metas y me esfuerzo constantemente para cumplir cada una de ellas, incluso cuando algo no sale como espero, busco soluciones para adaptarme y reinventarme. Creo que ahí está mi verdadera fortaleza”.Uno de sus proyectos más destacados fue su colaboración con la firma Marea Blanca, que abrió paso a lo que hoy es su gran apuesta: SANT MAKRE, una colección de prendas únicas con identidad artesanal. Organizada, empática y resiliente, Carolina representa a esa generación que entiende la moda como un estilo de vida consciente, artístico y profundamente humano.