Mantente alerta con una persona de piel clara que podría causarte un conflicto familiar o involucrarte en una situación incómoda. Evita compartir tus planes o confidencias con cualquiera; no todos los que te sonríen tienen buenas intenciones. Se aproximan días favorables en los que lograrás liberarte de cargas emocionales que te mantenían atado al pasado. Es momento de dejar atrás a quienes solo complican tu vida y te restan tranquilidad. Tu inocencia se ha ido disipando a base de experiencias difíciles. Aunque algunas caídas te dolieron, te hicieron más sabio y resistente. No te castigues por haber confiado en quien no lo merecía; aprendiste lo que necesitabas para avanzar. Eres fuerte y protector con los tuyos, pero a veces te descuidas a ti mismo. Las críticas no te afectan, salvo cuando provienen de quienes más quieres. Aprende a decir “no” sin culpa; poner límites también es una forma de amor propio. Si tienes pareja, podrían presentarse celos o discusiones que conduzcan a una separación temporal, necesaria para que ambos se valoren. No te sometas ni permitas manipulación; el amor debe traer calma, no sufrimiento. Pronto recuperarás cosas —y sentimientos— que creías perdidos. Prepárate para rumores o comentarios malintencionados: habrá quien intente alterar tu tranquilidad. No te rebajes; tu paz vale más que las habladurías.El trabajo demandará más de ti, pero lejos de perjudicarte, te permitirá tomar distancia de personas que te desgastan. Estás en una etapa de depuración emocional y social: aprenderás a conservar solo lo que aporta bienestar. Se avecinan días de reflexión profunda. Tendrás la claridad para reconocer qué ya no tiene cabida en tu vida y la valentía para cerrar ciclos. No te dejes atrapar por amores del pasado; lo que terminó, terminó por una razón. Tu carácter fuerte puede alejar a algunos, pero también es tu escudo. No te culpes por ser auténtico, aunque conviene cuidar tus palabras: a veces hieres sin intención. La firmeza no está reñida con la sensibilidad. Hay momentos en los que desearías desaparecer, pero no lo hagas. Lo que hoy duele mañana se convertirá en aprendizaje. No te dejes dominar por pensamientos negativos ni dramatices más de lo necesario. Recuerda que hay personas que te aman y se preocupan por ti.La vida te ha puesto a prueba muchas veces, y aunque parezca injusta, cada obstáculo te ha fortalecido. No te quedes en el papel de víctima; eres más luminoso de lo que crees. Deja que tu luz vuelva a brillar con fuerza.El día que aprendas a mirarte con amor y dejes de buscar aprobación en quien solo te roba la paz, descubrirás la verdadera felicidad. No ruegues cariño ni atención; lo que se mendiga nunca llena el corazón. Es momento de cuidar tu propia vida antes de intentar sanar las de los demás. Con información de Nana Calistar. EE