En el verano de 1962, el editor Stan Lee se presentó en las oficinas de Marvel Comics con la propuesta inviable de un adolescente de preparatoria, llamado Peter Parker, el cual, al ser mordido por una araña radioactiva, conseguía poderes similares a los de una araña: fuerza, velocidad, agilidad, y una especie de sentido premonitorio que le permitía anticiparse a los peligros múltiples de la jungla de concreto de Nueva York. No resultó una oferta atractiva para la casa editorial, en un panorama en el que los cómics estaban a la orden del día, y eran un fenómeno tanto cultural como económico en Estados Unidos. El Peter Parker de Stan Lee era un protagonista más bien insulso, insignificante, larguirucho y flaco, y con gafas de bibliotecario. Nada tenía que ver con el portentoso Capitán América, abanderado de la libertad y de la democracia gringa, con el multimillonario Iron-Man, que hacía y deshacía a su gusto, con los populares Cuatro Fantásticos, más celebridades que héroes.No: Peter Parker no era más que un adolescente de quince años, víctima de bullying y acoso, atrapado en una juventud desafortunada, y al que la vida le había cambiado para siempre tras ser mordido por una araña. "Peter Parker" no tenía nada de aquellos ídolos que habían posicionado a la industria de los cómics como una de las más redituables a mitad del siglo XX. Peter era un huérfano que vivía con sus dos ancianos tíos, al que las adolescentes no miraban ni por error, y marcado desde siempre y para siempre con el estigma de la mala suerte. Los editores de Marvel le dieron a Stan Lee una respuesta determinante: "a nadie le gustan las arañas". No obstante, la historia se imprimió, y el primer cómic en el que apareció Peter Parker, el "Amazing Fantasy #15", y la historia trágica de cómo la vida lo llevó a convertirlo en "Spider-Man", salió al mercado en agosto de 1962. La mala recepción de los editores llevó a Stan Lee a pensar que su creación sería relegada al olvido de los cómics y sus infinitos héroes más sobresalientes, no solo en Marvel sino en la competencia que, al contrario del adolescente sin gracia, tenía personalidades como Superman, Batman, o la Mujer Maravilla. Para su sorpresa, el "Amazing Fantasy #15" resultó un éxito inesperado de ventas. Algo ocurrió, algo que en su momento no previeron, pero los editores de Marvel le solicitaron a Lee que continuase con la historia del trepamuros. Le dieron una saga como protagonista, la cual estrenó su primer número en marzo de 1963, y que, 62 años más tarde, sigue publicándose. El éxito de Spider-Man fue ese: que "Peter Parker" era humano. Era un adolescente, un estudiante, una persona común y corriente a la que los superpoderes le acarreaban más desgracias que ventajas. Los jóvenes de los 60 se sintieron identificados con un personaje que sufría del mismo modo que ellos, al contrario de figuras modélicas, multimillonarias y bien parecidas como "Superman" o "Iron Man", con los que nada tenían que ver.Stan Lee, visionario, confirió a "Spider-Man" de todo tipo de desgracias cotidianas y humanas: es un héroe y tiene superpoderes pero está enfrascado en dificultades económicas interminables, le cuesta mantener un trabajo estable, y su doble vida de vigilante enmascarado lo lleva a descuidar sus relaciones personales y sus estudios. Está carcomido de miedos y dudas; sus amigos piensan que los olvida, no tiene suerte en el amor, es incapaz de llegar a una cita romántica a tiempo y sufre de situaciones melodramáticas, y, lo más importante, aprende por las malas que no le es posible salvar a todos, y menos a las personas más importantes de su vida. Nunca se había leído algo similar en el mundo de los cómics. "Spiderman" es un ícono de la cultura popular, y ha sido reproducido en infinitos medios y versiones. Al cine ha sido llevado de la mano de múltipes directores, siendo el primero Sam Raimi con su película del 2002 -cuya saga también es considerada un clásico-, y siendo la más reciente "Spider-Man: No way home", la cual forma parte del Universo Cinematográfico de Marvel, y que fue estrenada en 2021. Este mes se celebra la historia de aquel adolescente desvalido y desafortunado, pero de corazón inmenso, que llegó un agosto de 1962 para cambiar para siempre la historia de los cómics y de la cultura. Como dijo Stan Lee: “¿Sabes cuál es una de las mejores cosas del traje de Spider-Man? Él estaba completamente cubierto, entonces cualquier niño podría imaginar que es Spider-Man… porque no se ve ningún color de piel. Podría ser negro debajo de eso, podría ser rojo, podría ser amarillo. Podría ser de cualquier raza”, indicó Lee.“Y eso no fue hecho a propósito, fue hecho accidentalmente, pero pienso que la mejor cosa que hicimos para que él pudiera ser cualquiera bajo ese disfraz”.Con información de MarvelFS
