El limón, un ingrediente indispensable en la cocina mexicana y un básico en la mesa de millones de hogares, vuelve a ser protagonista de los titulares por el incremento en su precio, como cada cierre e inicio de año, su costo registra un repunte significativo, pero en los últimos años la situación se ha agudizado al punto de alcanzar cifras récord en la economía nacional.De acuerdo con el artículo académico “Una hipótesis sobre el incremento del precio del limón en México, 2022” el comportamiento del precio del limón sigue un ciclo bien definido: los aumentos suelen presentarse entre diciembre y marzo, mientras que los precios más bajos se observan entre abril y mayo, esta tendencia responde directamente a los ritmos naturales de la cosecha.En diciembre, la producción alcanza su punto más alto gracias a las exportaciones, pero los meses siguientes son los más complicados para los productores, entre enero y marzo, las condiciones climáticas y la baja floración del cítrico reducen drásticamente los rendimientos, provocando escasez en el mercado nacional.En dicho artículo también se explica que a la tradicional brecha entre oferta y demanda se suman otros elementos que han intensificado la volatilidad del mercado:En conclusión, la subida del precio del limón a fin de año no es solo una consecuencia natural del calendario agrícola: es el reflejo de un mercado presionado por el clima, la economía y la inseguridad. Una combinación que, año con año, encarece el sabor del limón en la mesa mexicana.NA