El mundo fue testigo de la impresionante ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos París 2024, en la cual se rompió con todo tipo de esquemas conocidos.La ceremonia arrancó con el desfile de atletas, algo poco visto en el olimpismo moderno y, en un hecho sin precedentes, lo hicieron a bordo de embarcaciones que transportaron a los representantes de 205 delegaciones, en un recorrido de seis kilómetros a lo largo del río Sena, ambientado por diversos números musicales y desembocando en Trocadero, al pie de la Torre Eiffel. Una vez concluido el desfile, el presidente francés Emmanuel Macron dio la bienvenida oficial a los atletas, dignatarios y espectadores de todo el mundo. Así comenzó de manera formal la justa, que concluirá el próximo 11 de agosto.El momento culminante de la ceremonia fue, sin duda, el recorrido final de la antorcha olímpica, en el que participaron grandes figuras del deporte, como Zinedine Zidane, Rafael Nadal, Nadia Comaneci, Carl Lewis, Serena Williams, Amélie Mauresmo y Tony Parker.Finalmente, el judoca Teddy Riner y la atleta Marie-José Pérec tuvieron el honor de encender el pebetero olímpico. Y en una exhibición verdaderamente espectacular, éste fue instalado en un globo aerostático, una invención francesa que simboliza el espíritu de innovación y elevación que los Juegos Olímpicos de París buscan representar. Esta obra maestra flotante permanecerá suspendida sobre el Jardín de las Tullerías durante los Juegos.El evento concluyó con la monumental voz de Céline Dion, la cual resonó desde lo más alto de la Torre Eiffel para darle la bienvenida una justa que promete ser tan o más memorable que su ceremonia inaugural.Zinédine Zidane, Lady Gaga y Céline Dion. París vibró con una inédita ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de 2024 a orillas del Sena, empañada por momentos por la otra protagonista del evento: la lluvia.A las 19:30 locales, el público rompe en aplausos cuando la estrella del fútbol Zinédine Zidane apareció en las pantallas que bordean el Sena y en las televisiones de millones de telespectadores en el mundo.Fue el tiro de salida de la primera ceremonia fuera de un estadio olímpico."Somos unos privilegiados", aseguró la mexicana Selene Martínez, sentada en primera fila de una tribuna de espectadores cerca del Museo del Louvre, junto a su compañero Israel Tejada. "Tengo una adrenalina impresionante”, agregó.Las 85 embarcaciones que trasladaron a las 205 delegaciones a lo largo de seis kilómetros del cauce del río Sena recibieron una lluvia de aplausos a lo largo del recorrido"¡Qué emoción! Estamos en París. Es la primera vez que veo esto. Es emocionante ver a toda esta gente unirse con el deporte", aseguró Michele Dufour, de 62 años, quien se enlistó como voluntaria.Todos los elementos para la fiesta estuvieron presentes. Banderas de los países participantes en los asientos, que el público agita sin dudar, puestos de comidas y bebidas, a los que el público acudió ávidamente durante el espectáculo de casi cuatro horas de duración.“Me sorprendió gratamente que haya sido realmente moderno y alegre. Me imaginaba algo más francés”, aseguró Nonna Kallee, una residente de 34 años.Desde el Puente del Carrusel, donde el pebetero olímpico sobrevuela los tejados del Museo del Louvre en una imagen de postal, muchas parejas se tomaron fotos románticas, dándole el cerrojazo a una ceremonia memorable.Más de 45 mil policías y gendarmes velaron por la seguridad de la ceremonia, a los que se sumaron 10 mil militares y unos mil 900 policías extranjeros, así como los voluntarios de la organización.La histórica ceremonia de apertura era el primer reto. Ahora llega el turno de la competencia deportiva, hasta la ceremonia final del 11 de agosto.AFP.
