Hay muchas historias dentro del ámbito deportivo de atletas que se encontraban en la cima del éxito y viviendo de sueño, pero que de un día para otro todo se derrumba y todos eso momentos de éxito y alegría solo quedan en los recuerdos, así es la historia de una patinadora rusa que ahora vive en las calles de México.Elena Gouliakova era conocida en Rusia por su calidad y talento en el patinaje, tuvo una destacada carrera en su país, tanto que gracias a sus grandes características la pusieron en un avión con destino a México en búsqueda de compartir su experiencia y ayudar a deportistas.Por desgraciada nada salió como lo había planeado, la ex figura de las pistas de hielo en la década de los noventa arribó a nuestro país junto a su esposo Nikolay Suetov en búsqueda de darle más exposición a los deportes invernales.Durante algunos años, Gouliakova compartió su experiencia en algunas escuelas particulares e instituciones de gobierno, pero la falta de apoyo en los deportes invernales fue fundamental para que su proyecto fracasara y se diera por vencida.Esta situación le provocó sufrir problemas de ansiedad y trastornos mentales que fueron perjudicando su carrera y su vida personal, al grado que su esposo la dejó.Sin dinero y con problemas para comunicarse, Elena comenzó a ser vista en diferentes calles con animales, durmiendo en callejones o puentes. Recientemente se viralizaron en redes sociales vídeos de la ex deportista en condiciones deplorables por las calles de Tepatitlán; el impacto que ha causado es tanto que los usuarios piden apoyo a las autoridades rusas para lograr llevarla a su natal Moscú y que pueda reunirse con su familia.JV