No hubo polémica en el Rose Bowl de Pasadena, pues a final de cuentas Santiago Ormeño se quedó en la banca de Perú durante el juego ante México.Previo al encuentro se habló mucho de la posibilidad de que el delantero de Chivas tuviera minutos contra el “Tri”, una situación que de haberse dado habría marcado un precedente para la Selección Mexicana y para el Club Deportivo Guadalajara. Aunque a simple vista esto podría no llamar la atención, el hecho de que Ormeño hubiera jugado contra México habría significado la primera ocasión en la historia en que un jugador del Rebaño aparece como rival del “Tri” enfundado en la camiseta de otro país. El fichaje de Ormeño con el Guadalajara ha sido polémico por estas mismas razones (tener doble nacionalidad), pero el destino -y el estratega Juan Reynoso, de Perú-, decidieron que el delantero rojiblanco se quedara sin actividad ante su otra nación.MF