El Museo del Prado de Madrid ha logrado reunir por primera vez ocho de los nueve cuadros que El Greco pintó para el retablo del Monasterio de Santo Domingo el Antiguo de Toledo, el cual fue muy admirado en su tiempo y que se dispersó a partir de 1830 debido a sucesivas ventas, expropiaciones y robos. Gracias a préstamos de diversas instituciones, coleccionistas privados y la congregación religiosa del monasterio, el museo ha logrado casi completar la colección, quedando únicamente un cuadro —que se encuentra actualmente en el Museo Hermitage de San Petersburgo, Rusia— que no ha podido ser incluido en la muestra.La exposición, titulada "El Greco. Santo Domingo el Antiguo", estará abierta al público hasta el 15 de junio de 2025. Esta muestra reúne las obras del primer encargo recibido por el pintor cretense tras su llegada a España en 1577. Durante los siglos XVIII y XIX, estas obras fueron consideradas "lo mejor del gran Greco", y no fue sino hasta principios del siglo XX cuando se "redescubrió" al pintor y se empezó a valorar su etapa tardía, especialmente por la admiración que generó en los artistas de las vanguardias.El proceso de dispersión comenzó con la venta en 1830 del gran cuadro central del retablo y continuó con sucesivas transacciones hasta 1961. A continuación, se detalla el recorrido de los cuadros a través de estas ventas y expropiaciones:La mayoría de las obras fueron reemplazadas por copias en el momento de su venta, mientras que las tres piezas prestadas por el monasterio han sido sustituidas por fotografías durante la duración de la exposición.*Mantente al día con las noticias, únete a nuestro canal de WhatsApp. AO