El escritor argentino Guillermo Martínez lanzó “Los crímenes de Alicia” (bajo la editorial Destino), libro con el cual obtuvo el Premio Nadal 2019, luego de una gira por América Latina, llegó a Guadalajara con esta novela, continuación de “Los crímenes de Oxford”; en entrevista, adelanta que la saga culminará con una idea que ya tiene en mente, pero que no desea revelar para mantener el factor sorpresa entre sus lectores. “Este fue el año que más viajé en mi vida, fue muy impresionante, ya estoy cansado ahora con la acumulación de viajes. La aventura comenzó con el Premio Nadal en Barcelona, después fui a Oxford para hacer un book-thriller, hice una gira en España, vine a México dos veces, a Perú y Colombia también, después al Hay Festival (en Cartagena), también hice un recorrido por todas las ciudades importantes de Argentina”, detalló el escritor.La trama de “Los crímenes de Alicia” se sitúa en 1994 en Oxford, cuando la hermandad Lewis Carroll decide publicar los diarios privados del autor de “Alicia en el país de las maravillas”. “Kristen Hill”, una joven becaria, viaja para reunir los cuadernos originales y descubre la clave de una página que fue misteriosamente arrancada. Pero “Kristen” no logra llegar con su descubrimiento a la reunión de la hermandad. Una serie de crímenes se desencadena con el propósito aparente de impedir, una y otra vez, que el secreto de esa página salga a la luz. Quienes buscarán llegar al fondo de estas intrigas son un profesor de lógica, “Arthur Seldom”, y un joven estudiante de matemáticas, mismos personajes centrales de la primera parte, “Los crímenes de Oxford”. Al respecto, Guillermo cuando estuvo en Oxford, hizo el ejercicio de reencontrarse con sus personajes. “Mi problema era si podía poner en pie, 15 años después, al profesor de lógica y su discípulo, y eso la verdad fue una sorpresa porque inmediatamente reaparecieron con sus formas de hablar y sus discusiones. Después tuve que imaginar a los miembros de la hermandad, uno por uno, ese fue el otro problema que me demoró bastante para resolver”.Y antes de entregar esta novela, volvió a hacer un viaje para revisar lugares, atmósferas y detalles de color para ajustar las palabras que había escrito: “Fue muy grato reencontrarme con la ciudad, y me dieron ganas de escribir un último libro para cerrar una trilogía que la pienso como la de la lógica y el crimen”.“Los crímenes de Alicia” es un híbrido entre la novela policial y la reflexión filosófica, donde la matemática es una fórmula importante en su contexto y desarrollo. “Eso es lo que más me interesa, hay dos o tres autores que yo he leído en esa línea, por ejemplo ‘La muerte y la brújula’, de Borges. Esa clase de novela me interesa particularmente y quisiera hacer algo por revivir el género policial de intriga con esta mirada de la epistemología y la filosofía”.El trabajo de Guillermo también ha estado latente en el cine, se hizo una película sobre su novela “Una madre protectora”, el filme se llama “El hijo” y está disponible en Netflix; “y estoy por firmar contrato para una adaptación de una novela mía que se llama ‘La muerte lenta de Luciana B’”. De hecho, Álex de la Iglesia hizo la versión fílmica de “Los crímenes de Oxford”.