Las comunidades indígenas, sus lenguas originarias, su cultura y tradición enriquecen y dan vida al contexto social de una nación, sin embargo, siguen siendo poblaciones vulnerables. En ese sentido se realizó la charla “Las culturas originarias y el diálogo intercultural en el siglo XXI”, en el marco del Congreso del International Society for the Performing Arts (ISPA).La ponencia tuvo como exponentes a Mardonio Carballo, director general de Culturas Populares, Indígenas y Urbanas de la Secretaría de Cultura; Keith Barker, director artístico actual de la Tierra Nativa Artes Escénicas en Canadá, y Margo Kane, directora artística de Full Circle: Primera Representación de las Naciones en Canadá. La ponencia estuvo dirigida por Ofelia Medina.“Se está abriendo un puente de diálogo con todas las culturas del mundo, eso me parece importante, hay una narrativa mundial de la otredad, de lo diferente, de lo femenino, de lo indígena, me parece que se comienzan a generar puentes internacionales”, afirmó Mardonio, quien agregó que es bastante oportuna la generación de esta narrativa para que se logren entablar lazos que desemboquen en mejores seres humanos. Aprender de la uniónOfelia, quien desde hace muchos años es una aliada de los pueblos nativos y las lenguas originarias, incluso realiza eventos en pro de las culturas indígenas durante la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL), en sus puestas en escena y proyectos fílmicos.“Este es un trabajo por la paz, la dignidad y la justicia de los pueblos originarios de América, en este momento en el que el planeta Tierra está en una severa crisis, es terrible lo que está sucediendo, y creo, en lo personal, que en las culturas originarias están las respuestas para esta crisis pavorosa en la que estamos viviendo. Primero porque las culturas originarias reivindican sus derechos colectivos, no solo los individuales, y eso es algo muy difícil de entender en nuestra sociedad. Nosotros aprendimos con los Zapatistas en Chiapas que sí somos comunidad, somos fuertes. Y las discusiones, las pláticas y los acuerdos se llegan de una manera colectiva”.Además, Ofelia detalló que las 68 culturas que hay en México viven en la miseria extrema, hecho “doloroso, penoso y agravante, pero esta situación también sucede en todo el continente, como pasa en Canadá que es un país tan rico, tan grande y tan importante, que tiene a sus poblaciones originarias en condiciones no dignas, y el trabajo que hacen Keith y Margo es luchar por los derechos culturales de sus pueblos”.Desde Canadá, Keith y Margo han sido luchadores incansables para impulsar a las comunidades nativas de su país en el quehacer artístico. Margo contó que el diálogo con el gobierno de Canadá está presente, pero la relación requiere de mucho trabajo: Hacer sinergia continuamente porque no se ha dado todavía una relación de coordinación y cooperación plena. Estos dos personajes en pro del desarrollo cultural de los pueblos originarios coincidieron también en que el trabajo para generar visibilidad, inclusión y oportunidades de crecimiento.
