Las FARC lanzan a amenazas por aniversario de muerte de Raúl Reyes

BOGOTÁ, COLOMBIA.- La policía colombiana alertó hoy sobre un plan de las rebeldes FARC, que incluye ataques y amenazas a través de panfletos en varias zonas del país, al cumplirse un año de la muerte del jefe guerrillero Raúl Reyes.

El director de la entidad, general Oscar Naranjo, dijo a una radio local que a través de panfletos, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) han forzado al transporte a parar, bajo amenaza de iniciar acciones contra sus empresas.

De acuerdo al oficial, el grupo insurgente sería además uno de los responsables de los mensajes que han sido distribuidos en algunas ciudades del país, en los que se amenaza a sectores de la población civil.

"Algunos son distribuidos por bandas que buscan atemorizar a la población, otros son panfletos de las FARC en un plan diseñado para adelantar un marzo negro, en retaliación por la muerte de Raúl Reyes", dijo Naranjo a la radio Caracol.

Reyes fue abatido el 1 de marzo de 2008, en una incursión del ejército colombiano a un refugio clandestino de las FARC en Ecuador, acción que derivó en la ruptura de relaciones entre los dos países.

En el marco del paro armado que declararon en regiones del nororiente y sur de Colombia, como Norte de Santander y Caquetá, las FARC han incinerado vehículos y bloqueado vías, pero sin causar víctimas humanas.

La última incursión se presentó este miércoles en el municipio de Tibú, fronterizo con Venezuela, donde los rebeldes hostigaron a unidades policiales y quemaron seis vehículos, informaron autoridades.

Las FARC también pretendían activar dos coches-bomba en Pasto, limítrofe con Ecuador, los cuales fueron hallados por la Policía en dos parqueaderos de esa ciudad de la zona sur de Colombia.

Según los primeros reportes, en la operación que permitió ubicar los autos con los explosivos fue capturada una persona bajo sospecha de pertenecer a las FARC, la mayor y más antigua guerrilla del país.

Naranjo señaló que los panfletos, en los que se amenaza a distintos sectores de la población, obedece a "un plan para crear zozobra", pero que la Policía ha ofrecido garantías de seguridad.