Viernes, 27 de Diciembre 2024
Cultura | Uno de ellos, el mexicano Rolando Villazón

Dos latinoamericanos los herederos al trono de Pavarotti

Pavarotti debutó en el Metropolitan Opera House de Nueva York en 1968 representando a Rodolfo en la ópera La Boheme de Puccini

Por: NTX

Pavarotti fue un innovador que fusionó la ópera con géneros musicales como el 'pop' y el 'rock'. ARCHIVO  /

Pavarotti fue un innovador que fusionó la ópera con géneros musicales como el 'pop' y el 'rock'. ARCHIVO /

CIUDAD DE MÉXICO (11/OCT/2011).- El mexicano Rolando Villazón y el peruano Juan Diego Florez son dos tenores latinoamericanos que se han colocado en el candelero por sus excepcionales voces y, sobre todo, por ser considerados por la crítica como sucesores del italiano Luciano Pavarotti.  

Pavarotti nació en Módena, Italia, hace 76 años, el 12 de octubre de 1935, y es recordado no sólo por su portentosa voz y presencia en los escenarios, sino por ser un innovador que fusionó la ópera con géneros musicales como el 'pop' y el 'rock'.  

Luciano creció en una familia humilde, a la que la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) obligó a salir de la ciudad en 1943.  

Las primeras influencias del cantante surgieron de las grabaciones de su padre, quien también había incursionado en el canto, y fueron cantantes como Beniamino Gigil, Giovanni Martinelli, Tito Schipa y Enrico Caruso. Pero su admiración estuvo centrada en el tenor Guiseppe Di Stefano.  

A los nueve años de edad comenzó cantar al lado de su padre en el coro de una iglesia local.  

En un principio había decido, por consejo de su madre, dedicarse a la docencia, sin embargo su vocación por el canto le llevó a convencer a su padre para que le permitiera seguir esta carrera, así, su familia decidió darle alojamiento y comida hasta los 30 años, si a esa edad no triunfaba tendría que ganarse la vida por sus propios medios.  

Las primeras apariciones de Pavarotti fueron en el Coro del Teatro de la Comuna, en Módena, y en 'La Coral', de Gioacchino Rossini.  

Pero su debut, se dio el 29 de abril de 1961 en el teatro de ópera de Reggio Emilia, donde encarnó a Rodolfo de 'La Bohéme', de Giacomo Puccini, papel que le dio gran reconocimiento y fue su debut en Metropolitan Opera House de Nueva York en 1968 y además fue objeto de la primera transmisión televisiva, desde ese teatro, en 1977.  

La consagración del belcantista se dio con su interpretación de Tonio en la ópera 'La hija del regimiento', de Gaetano Donizetti, junto a la soprano Joan Sutherland, actuación que le valió la portada de 'The New York Times'.  

Junto a Sutherland y la mezzosoprano Marilyn Horne realizó las grabaciones de 'Lucia di Lammermoor', 'La file du régiment'', 'La Traviata', 'Il Trovatore', 'Rigoletto'. 'L´élisir d´amore', 'I puritani', 'La sonnambula', 'María Stuarda', 'Beatrice de Tenda' y 'Turandot'.  

El cantante, clasificado como tenor lírico, también representó en algunas ocasiones papeles dramáticos que ayudaron a preservar la flexibilidad de su voz y añadió papeles del repertorio francés y alemán.  

Las actuaciones más comentadas del cantante fueron las que realizó a lado de José Carreras y Placido Domingo, con quienes formó el trío 'Los tres tenores', con la finalidad de llevar la ópera a todo tipo de público.  
La primera presentación del trío fue en la clausura del mundial de fútbol de 1990, en Italia, obteniendo tal éxito que se repitió en las clausuras de los mundiales de 1994, 1998 y 2002, además de haber realizado varios conciertos adicionales.  

Como parte de este esfuerzo por acercarse a más gente, colaboró con cantantes y agrupaciones populares como Eros Ramazzotti, Sting, Sepultura, Andrea Bocelli, Celine Dion, Liza Minelli, Elton John, Tracy Chapman, Frank Sinatra, Michael Jackson, Barry White, Mercedes Sosa y U2.  

A partir de 1991, Pavarotti se unió a los esfuerzos de la organización 'War Child', para recaudar fondos para la construcción de un centro de musicoterapia en Mostra, Bosnia.  

Así surgió la organización anual de conciertos en Módena, bajo el título 'Pavarotti and Friends', donde se recaudaban fondos a beneficio de los niños. Con ello, Pavarotti se convirtió en el primer tenor conocido por el gran público.  

El 13 de marzo de 2004, el tenor se retiró en el Metropolitan Opera House representando a Mario Cavardossi, en la 'Tosca', de Puccini. Pero en mayo de ese mismo año anunció 'La gira del adiós' compuesta de 40 conciertos alrededor del mundo.  

A pesar de este retiro interpretó el aria 'Nessun dorma', de la ópera 'Turandot', de Giacomo Puccini, como cierre de la inauguración de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2006, en Turin, Italia.  

'La gira del adiós' fue suspendida, debido a una intervención que sufrió en la espalda a principios de 2006 y al prepararse para reanudar la gira, le fue diagnosticado un tumor maligno en el páncreas.  

Por ello, fue operado el 7 de julio de 2006 cancelando todos sus conciertos a causa de su delicado estado de salud, provocado por una neumonía posterior a la operación.  

El 8 de agosto de 2007 fue hospitalizado de nueva cuenta, por complicaciones respiratorias y el 25 de ese mes, abandonó el hospital para continuar la convalecencia en su casa, donde finalizó sus días el 6 de septiembre de ese año, a causa del cáncer de páncreas.  

En la ceremonia fúnebre, la fuerza aérea italiana realizó una exhibición de despedida y asistieron miles de personas para dar el último adiós al tenor.  

Mientras que la ceremonia religiosa contó con la participación de destacadas figuras de la música como Andrea Bocelli, la soprano Raina Kabaivanska y el flautista Andrea Griminelli. Sus restos descansan en el cementerio Montale Rangote de Italia.  

Luego de su deceso, la prensa y la crítica se han dado a la tarea de encontrar un sucesor, y pusieron la mirada en el suizo Salvatore Licitra, quien de facto había surgido al sustituir a Pavarotti en 'Tosca', sin embargo Licitra falleció este año a causa de un accidente automovilístico, dejando de nuevo el puesto vacante.  

Ahora, las miradas apuntan hacia el mexicano Rolando Villazón y el peruano Juan Diego Florez-, a este último el propio Pavarotti lo "designó" en el pasado como su 'heredero' y ha sido nombrado como el mejor belcantista del siglo XXI, ostentando el mote de 'el rey del bel canto'.  

Villazón se halla un poco a la saga, luego de las críticas que se ha ganado por las múltiples cancelaciones de los últimos años, argumentando motivos de salud, aunque su técnica y conocimientos de canto lo podrían reposicionar como favorito de la prensa para ocupar el sitio del italiano.

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